El Mundo Contigo - Joana Arteaga

Buenos dias,

en el libro de hoy conocemos a Martina, una chica aventurera sin patria fija a la que el mundo se le queda pequeñoa veces.

El Mundo Contigo - Joana Arteaga

Sinopsis

 Martina está buscando su lugar en el mundo después de haber recorrido medio planeta. Aún no sabe si su corazón quiere dejar su vida nómada y echar raíces o seguir su itinerario vital de un lugar a otro.

Un buen destino para averiguarlo es Nueva York, una ciudad que siempre proporciona sorpresas, sobre todo cuando su jefe, el atractivo y carismático Saul J. Coleman, le proponga un viaje de negocios a Chicago, y se quede atrapada en un ascensor con el sorprendente, divertido y vital Will 'Marie' Duquette.

Dos formas de entender la vida y afrontar el amor que harán que Martina se debata entre seguir su peregrinaje por el mundo o encontrar al perfecto compañero de viaje.

Si te gusta el estilo chick lit de Marian Keyes, 'El Mundo, Contigo' te va a encantar.

Opinión

  Martina Egia es una chica sin patria; su padre es un chef vasco, su madre una diplomática húngara y su infancia ha pasado sin un hogar fijo. Tiene un blog dedicado a los viajes y ha encontrado su actual trabajo en la editorial Coleman and Asociated Publishing, en Nueva York, gracias a que su madre es amiga del señor Coleman senior.

 Los viernes siempre va con sus amigas a tomar algo cuando terminan su jornada. Excepto este que tiene que esperar una confirmación de vuelo del señor Coleman junior, su jefe, a Chicago para acudir a la BookExpo América. Una vez que la tiene, a Saul Coleman se le ocurre la brillante idea de llevarla con él a la Expo, así que cualquier plan que tuvera para ese fin de semana se convierte en un par de días acompañando a su jefe a reunión tras reunión y aguantando su lenguaje pedante.

 Pero ese viernes ha ocurrido algo más: mientras estaba bajando en el ascensor rumiando su mala suerte, este se queda parado aunque no está sola. Además de ella hay un chico que dice llamarse Marie. Aprovechando la intimidad forzosa del ascensor, empiezan a hablar y a conocerse un poco mejor.

 Y es entonces cuando se sube a una montaña rusa de la que no sabe como bajar... Saul se muestra interesado en ella, en sus ideas respecto a la editorial, piensa en ascenderla pero nuestra protagonista no para de pensar en Marie, un Marie que se va a casar pero con el que se ha vuelto a encontrar casualmente, al que sigue viendo y del que cada vez le cuesta más despedirse. Sobretodo cuando la actitud de Saul hacia ella está llena de altibajos...

 Un libro en el que cabe destacar la elegancia con la que está escrito, una prosa sencilla que no es difícil de seguir y hace que te encariñes con una Martina que a veces es un amor, otras llora y otras está hecha un lio. Una Martina que no sabe si lo que está viviendo es su sueño o si sueña con otra cosa. Una Martina valiente y generosa aunque duela.

 Esta lectura ha sido una grata sorpresa. Creía que iba de la típica historia entre jefe y secretaria y no, nada que ver, tiene mucha más trama aparte de eso. A ver, hay un jefe y una secretaria pero también mucho más. Hay amistad, compañerismo, falta de ídem - odio a Claire, lo digo así -, meteduras de pata, arrepentimiento, reconciliaciones, rupturas, idas de pinza, lloros y alegrías. Hay subtramas que le dan profundidad a los personajes secundarios y hacen que no sean simples adornos.

 Los padres de Martina, Marie, la familia Coleman, las locas de sus amigas, incluso Onur o la despreciable Virgina Olsen desempeñan un papel en la historia.

 En resumen, una buena lectura, dulce, lenta y llena de sentimientos. Una lectura en la que se dan cita los sueños, las segundas oportunidades y el miedo al triunfo o al facaso. Una lectura que también cuenta con alguna que otra sorpresa con lo que puede hacer las delicias de los amantes del romanticismo.

 ¿Recomendado? Para los románticos empedernidos, sin duda.

 Una lectura organizada por María del blog Vida de una Lectora Dispersa. ¡Muchas Gracias!

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 "Nadie está libre de decir estupideces, lo malo es decirlas con énfasis" - Michel de Montaigne