Tenemos una Granja - Ester G. Escobar

Buenos dias

¿qué harías si te tocara en herencia una casucha perdida en mitad del campo? y tu fueras alguien que vive adaptado al asfalto de la gran ciudad.

Tenemos una Granja - Ester G. Escobar

Sinopsis

La madre de Álvaro y Serena acaba de fallecer, dejándoles huérfanos, recibiendo en herencia el que había sido su hogar familiar, una granja en Ródenas, Teruel. Pero solo podrán heredarla con una condición: convivir en ella durante al menos seis meses.Los dos hermanos tienen su vida construida en Barcelona. Aun así, deciden emprender esta nueva aventura por motivos bien distintos y encarando la situación de modo muy diferente. Serena, como una oportunidad; Álvaro, como una obligación. Esta aventura les llevará a conocer a personas encantadoras como Lucía, Diego o la pequeña Andrea, y les pondrá en situación de conocerse mejor a sí mismos, y decidir por qué están dispuestos a luchar. ¿Se convertirá el pequeño pueblo de Ródenas en algo más que una aventura para ellos?

Opinión

 Álvaro y Serena son hermanos, viven en Barcelona y hace años que dejaron atrás una granja que sus padres tenían en el pueblo. Rodeados de tráfico, estrés y montones de personas, lo último en lo que piensan en es el campo.

 Sin embargo, tras fallecer su madre, reciben la granja en herencia con la condición de pasar seis meses en ella para poder recibir todo lo que sus padres les han dejado. Álvaro es más reticente que su hermana ya que ella, al llevar una revista online, puede trabajar desde casi cualquier lugar pero él no puede ni quiere dejar su importante trabajo por esa loca aventura.

 Serena no se rinde y Álvaro tira la toalla cada dos por tres. Esto es más o menos lo que sucede con los hermanos cuando llegan al pueblo perdido en los mapas y se encuentran con una granja que se cae a pedazos y que poco tiene que ver con lo que recuerdan, así que además de abandonar su vida y sobreponerse a la pérdida de su madre, tienen que hacer frente a dificultades sin límites.

 No van a estar solos ya que habrá gente en el pueblo dispuesta a echarles una mano -aunque a veces den ganas de echársela al cuello- para que consigan sacar la granja adelante.

 Servidora vive en un pueblo, un pueblucho de mala muerte -con todo el cariño del mundo- que casi no tiene ni servicio de correos, en el que hay pocos habitantes y para comprar una barra de pan tengo que coger el coche. Así pues no me queda otra que sentirme identificada por completo con la ambientación que ha logrado la escritora a lo largo del libro: un pueblo donde los rumores se extienden como el fuego por la gasolina o la pólvora, en el que la gente se sabe al dedillo la vida de los demás y en el que el señor alcalde tiene cierta tendencia a no considerar en demasiada estima a los que vienen de ciudades grandes por las consecuencias que eso acarree al pueblo -¿¿??-.

 Con esto quiero decir que el libro me ha gustado. Y mucho. Hasta ahora la experiencia que tenía con el género chick lit se resumía en los libros de Los Chicos del Calendario y las historias de Beta Coqueta que ha quedado más que demostrado por mis reseñas que no son lo mío. Este libro, por el contrario, ha conseguido que me reconcilie con el género.

 Serena es una protagonista valiente a la que no se le oscurece nada de lo que hace; decide ponerse al frente de la granja contra viento y marea y aunque tenga momentos de bajón por los reveses que recibe, sigue adelante. Igual que con su revista, a la que dedica el tiempo del que dispone tras sus obligaciones granjeras, ya que el en pueblo hay internet -¡milagro! ¡tienen internet!- y puede estar en contacto con su segunda al mando, Iris.

 Álvaro es diferente a su hermana. La apatía y el desánimo hacen presa en él cada vez que surge una dificultad y hubiera preferido tirar la toalla desde el principio pero se deja arrastrar por el ánimo y las ganas de luchar de su hermana y termina apoyándola. Se llevará alguna sorpresa en el pueblo ya que no todo ni todos son como el pensaba.

 Lucía y Diego, oriundos del lugar, les dan la réplica a los hermanos cosmopolitas con sus diferentes caractéres y formas de vivir y ver la vida. Lucía es alegre, directa, sincera y dice lo que piensa. Diego, por el contrario, parece que se le ha comido la lengua el gato y da la sensación de ser huraño y taciturno.

 Rodeando a estos personajes está la bucólica ambientación que me ha parecido de lo más acertada. Los problemas del día a día de una granja que yace abandonada, los gastos que conlleva, las idas y venidas de la suerte, lo que supone no saber nada de determinados temas e ir un poco a lo tio Pedro,... y los personajes reaccionan y cambian según a lo que se enfrentan; su evolución se ve a lo largo de la lectura y no solo en el terreno pastoril sino en el sentimental ya que creerán que tienen claro lo que quieren y lo que no, se harán un lío con lo que sienten, no se ven venir determinadas cosas -o personas-, se enredaran en sus corazones, en sus pensamientos, en sus sentimientos y eso los llevará a tomar decisiones acertadas... o no.

 En resumen una lectura con la que he disfrutado de principio a fin por sus personajes reales, cercanos, con los que se empatiza por lo que piensan y como lo piensan, por la claridad con la que la escritora ha plasmado sus reflexiones acerca de lo que están pasando, lo que sucede en sus cabezas y corazones y la montaña rusa en la que han decidido subir sus vidas a ver como termina todo. Hay que añadir que hay momentos y escenas para todos los gustos: llenos de amor, ternura, cariño pero también peleas, riñas y tensión. Es decir, para reir, llorar, tirarse de los pelos o quedarse así 😨😧😵

 ¿Recomendado? Sin ninguna duda.

TEXTO A OCULTAR

 Muchas gracias a la escritora y a Eva del club de lectura Entre Libros y Tintas por haber organizado esta lectura conjunta. Compra el libro AQUI.

¿Qué opinas? ¿te ha gustado la reseña? ¿leerías el libro? Por favor, deja tu respuesta en un comentario. Gracias!

 "No hay barrera, cerradura, ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente." - Virginia Woolf.