Quimera, las edades Bárbaras - Malenka Ramos

¡Buenos dias!

Hoy os traigo un libro lleno de sentimiento, tragedias y superación. ¿Los años pueden curar las heridas?

Quimera, las edades Bárbaras - Malenka Ramos

Sinopsis

 En los años 50, los castigos, las celdas de aislamiento y los abusos a los niños eran algo habitual en el orfanato de San Torbe. Antón se juró regresar cuando fuera un hombre, derribar los muros de ladrillo que tanto dolor les habían causado y construir Quimera.

 Un hogar para todos, sin importar su condición, sexualidad o declinaciones. Cuarenta años después, todos esos niños, ahora hombres y mujeres, siguen en contacto pero pocos desean regresar al lugar que tanto dolor les causó. Antón no está dispuesto a que olviden los buenos momentos que vivieron allí y la promersa que se hicieron siendo unos niños y por eso les envía una carta a cada uno. Quiere reunirlos de nuevo en Quimera. ¿Logrará Antón reunirlos de nuevo? ¿Cumplirán aquella promesa que se hicieron de niños? Y, sobre todo... ¿qué sucedió en San Torbe que cambió sus vidas para siempre?...

Opinión

 Unos niños dejados de la mano de Dios en un orfanato - el orfanato de San Torbe, uno más de tantos en los que se dejaba a los niños durante la guerra - donde los abusos están a la orden del dia. Unas niñas que viven en un convento cercano. Unos túneles que unen ambos sitios donde la amistad, la complicidad y el amor dan un poco de consuelo y de luz al día a día de esos jóvenes.

  Antón, uno de los niños que vivió el infierno de San Torbe, décadas después compra el edificio y construye Quimera. Envia invitaciones a sus antiguos amigos y compañeros para que lo acompañen en la inauguración.

 Mientras espera respuesta, le va contando a su ama de llaves Candela los hechos que ocurrieron dentro de los muros de San Torbe y que marcaron su vida y la de sus amigos para siempre.

 Entremezclado con su narración de los hechos, viajando al pasado y viviendo lo que pasó, tambien permanecemos en el presente, en la vida actual de alguno de los niños y su reacción al recibir la invitación para ir a Quimera.

 Pero los castigos y la violencia no son lo único que hay entre las paredes de San Torbe. Hay también amistad, amor y descubrimientos acerca de sus jóvenes cuerpos porque ni la disciplina más férrea puede impedir que los niños crezcan.

 También cabe mencionar a Madame Bishop, dueña de una casa de variedades que también frecuentarán los ya no tan niños del internado y que en algún momento se convierte en madrina de estos.

 Diferentes historias, personajes y heridas que sanar. Unos niños que crecieron y maduraron como pudieron dentro de esos dañinos muros y luego se enfrentaron a la vida con las armas de las que disponian.

 Un libro en el que los sentimientos están a flor de piel página a página, donde vemos la sinrazón del sufrimiento de unos niños inocentes en manos de unos bastardos amargados y reprimidos que hacian y deshacian con ellos a su antojo.

 Vivimos la impotencia de los niños, por no saber por qué los castigan, qué han hecho mal o ver como los castigados son sus amigos hasta el borde mismo de su resistencia.


 Sin duda, una lectura recomendada que dejará poco que remover dentro de nosotros. Una prosa madura, tranquila y envolvente que plasma como pocas todo el abanico posible de sentimientos. Unos personajes llenos de matices, profundos y marcados. Unas descripciones ricas, intensas y esclarecedoras. Un libro que se termina con lágrimas en los ojos al dejar atrás esas historias de valentía y superación día tras día después de salir del infierno.

¿Qué opinas? ¿te ha gustado la reseña? ¿leerías el libro? Por favor, deja tu respuesta en un comentario. Gracias!

"No temeré al dolor porque me hace fuerte" - Alexander y Antón.