Sinopsis: Clarissa trabaja como administrativa en la universidad de Bath y acaba de dejar atrás una relación amorosa. Rafe Solmes, un profesor al que conoce superficialmente, la invita a la presentación de su libro en una librería local. Siempre educada, Clarissa acepta y allí acaba bebiendo algunas copas de vino de más. Rafe, caballeroso, se ofrece a acompañarla a casa. A la mañana siguiente Clarissa se despierta con el cuerpo dolorido, sin recordar apenas nada y con la sospecha de que ha sido víctima de algún tipo de abuso sexual. Pero la cosa no acaba ahí porque a partir de ese dia empiezan las insistentes llamadas, notas, agasajos y apariciones sorpresas de Rafe. Ante el creciente acoso y consciente de que es difícil denunciarlo con éxito, Clarissa decide llevar un diario y acumular pruebas. Y cuando la convocan como jurado en un juicio, ve la oportunidad de liberarse momentaneamente de su acosador.
Opinión: Una novela para reflexionar, y mucho, acerca del acoso, los acosadores y las víctimas: la impunidad de la que gozan aquellas y la desprotección que tienen estas. El libro mantiene una atmósfera agobiante, se pasan malos ratos y no tiene muchas alegrías.
Página a página vemos a Clarissa acosada por Rafe de una y mil formas diferentes, con un montón de gestos que pasan desapercibidos para todo el mundo excepto para ella: a los ojos de los demás, es un ángel que la cuida, la protege y la trata con mimo. Valiéndose de esa falsa imagen, la va aislando de familia y amigos, haciéndola pasar por una histérica y egoista a la que van dando la espalda poco a poco dejándola sola y sin nadie a quien poder acudir a pedir ayuda.
Página a página vemos a Rafe acosar a Clarisa de todas las formas posibles: una flor, una caja de bombones, una carta, unas fotos, un susurro al oido inesperado y terrorífico mientras camina: "se lo que has comido" "se que te duele la cabeza" "se que estás con la regla", un coche aparcado frente al juzgado justo a la hora en la que sale,... Y todo eso sin que ella pueda hacer nada por impedírselo.
Las situaciones de acoso que narra Claire Kendal en el libro son escalofriantes y ponen los pelos de punta porque no son ni más ni menos que lo que sufren las víctimas de acoso dia tras dia y la respuesta universal de las autoridades es:
hasta que no le pase algo, no podemos hacer nada. Esta respuesta es la que también le dan a Clarissa y por eso se decide a llevar un diario y a recopilar pruebas, para que el dia que le
pase algo haya suficiente material como para condernarlo.
¿ Recomiendo el libro? Si, a pesar de que estaba deseando terminarlo porque me ponía muy mal cuerpo a ratos. Aunque solo sea por mayor y mejor comprensión de la situación por la que pasan las personas que sufren acoso, habría que leerlo.
"El hombre nunca sabe de que es capaz hasta que lo intenta" Charles Dickens.